La Historia Interminable - Michael Ende
La Nada empezó hace 16 años. Su entrada fue bastante violenta y se hizo patente desde el primer momento: afectó directamente al corazón. Su vacío provocó, como no podía ser de otra manera, que desde entonces nada fuera igual.
Sin embargo, tras la abrupta llegada, su propagación fue mucho más lenta, hasta el punto de que casi se hizo imperceptible. Pero siguió y siguió creciendo y hay pocas cosas que salvar ya de la Nada: apenas tengo sueños y he perdido la esperanza; es demasiado tarde para conseguir huir. Pocos recuerdos quedan ya para luchar en su contra, y los que quedan, ¿son reales?
La atracción que ejerce es demasiado fuerte, me arrastra hacia ella. No queda mucho tiempo para dejarse caer al vacío.