La playa estaba vacía. Lo único q rompía el silencio q mantenían ambos era el ruido de las olas en la orilla. La brisa q venía del mar, arrastraba consigo miles de pequeñísimas gotas de agua, y los dos sentados en la arena sentían como les refrescaban las caras con cada golpe de viento.
- Estás helada.- Le acarició el brazo erizado y sintió su piel fría.
- Sí, un poco.- Contestó ella, haciendo una mueca.- Pero estoy bien aquí, no me quiero ir todavía.
Él la rodeó con sus brazos intentando darle un poco de calor. Y continuaron callados mirando al mar.
- Estás helada.- Le acarició el brazo erizado y sintió su piel fría.
- Sí, un poco.- Contestó ella, haciendo una mueca.- Pero estoy bien aquí, no me quiero ir todavía.
Él la rodeó con sus brazos intentando darle un poco de calor. Y continuaron callados mirando al mar.
Entre amigos no es necesario decir nada. Sin embargo, qué importante es saber q el otro estará ahí para cuando haga falta decir algo.
GRACIAS